Los terrenos compuestos por arcilla o arenosos, son húmedos por naturaleza. Cualquier muro, cimiento o piso que se le ponga encima, va a contrastar la natural evaporación del suelo. La humedad, en forma de vapor, debido al proceso denominado capilaridad, a fenómenos osmoticos y a la diferencia entre la temperatura del muro y la temperatura del ambiente exterior, sube hasta los 100/ 150 cm. del suelo. Esa humedad ejerce una presión que hincha la pintura y el reveco, luego las esporas procedentes del aire que les rodea se depositan en ese caldo de cultivo ideal y por esta razón se desarrollan mohos y malos olores.
Con la utilización de HigroStop, se soluciona de forma natural, rápida, eficaz y con un coste asequible el “problema humedad”.
En el mercado existen muchas tecnologías que se utilizan para enfrentarse a este problema:
- Las infiltraciones en los muros de productos químicos, tóxicos en la mayoría de los casos, tienen como gran consecuencias de trasladar el problema a otra parte donde no ha sido infiltrado el producto y así no lo solucionan.
- Los cortes en los muros para insertar materiales como laminas de resina o PVC, no siempre se pueden hacer, sobre todo cuando el muro esta en directo contacto con la tierra, y siempre los cortes debilitan la estructura, que ya no tiene el mismo apoyo de antes, en el suelo. Además estas técnicas están prohibidas en zonas con riesgo sísmico.
- La utilización de pinturas o materiales osmóticos/ deshumidificantes / transpirantes, tienen el inconveniente de su efecto limitado en el tiempo. En el 80% de los casos en unos años el problema vuelve a reaparecer destruyendo nuevamente el revoco, haciendo aparecer el salitre responsable del degrado de los materiales.
- El uso de aparatos electricos que invierten la polarizazion de las moléculas de agua, tienen un radio de acción muy limitado y son muy caros.